Deberíamos comenzar preguntándonos ¿a qué llamamos un niño con altas capacidades? ¿Altas capacidades para qué? 🤔 Estas preguntas, desde nuestra mirada, nos llevan a la afirmación de que un niño o niña no tiene ni altas ni bajas ni medias capacidades sino que llega a la tierra como un ser dispuesto a andar caminos. Llega con dones ya conquistados y (por suerte) con muchos otros por conquistar. 😊
Desde la mirada del mundo materialista decir «altas capacidades» siempre está referido a lo intelectual, se nombra a un niño/a con dones ya conquistados en relación al PENSAR, pero aún queda camino por andar en el SENTIR y en el HACER. 🙌
Entonces, retomando el mito, podemos decir que en la escuela nunca un niño o niña se va aburrir (entendiendo el término peyorativamente) frente a propuestas que lo nutran y le permitan desarrollar todos sus dones de manera armoniosa y rítmica. 🌈